EDITORIAL : en esta hora difícil

La derrota por 1-3 que el Sporting de Braga sufrió anoche en el AXA Stadium lleva a muchos aficionados del club arsenalista a la reflexión obligada. El caos forzoso que se vive en torno a la cobertura con garantías de la portería arsenalista, parece haber contagiado al sistema defensivo que, frente al Bilbao, cometió errores de patio de colegio.

Todo esto, que es normal en los ajustes de una pretemporada, se agrava en el caso del Braga al estar a menos de una semana del trascendental partido de ida de la 3ª eliminatoria de Liga de Campeones, con el Celtic de Glasgow. Es decir, casi no hay tiempo para arreglar esto y procede más cruzar los dedos y ver qué pasa...

La situación ha venido así : las desgracias en la portería, sucesivas lesiones de los elementos deseados para tan delicado puesto, han situado al equipo contra las cuerdas y... a ver ahora qué pasa. Todo lo contratado, por historial y por índices de actividad-titularidad lleva a los aficionados a la desconfianza. Pero es lo que hay. No hay otra cosa. Tal vez en el mercado de invierno se pueda reajustar el asunto. Ahora, desgraciadamente, toca pensar en apoyar lo que se tiene, a ver si de un mediocre guardameta se logra el milagro de un portero con oficio que salve las situaciones. Imposible no es, pero fácil tampoco... Con todo, solo hay un camino : apoyar a ese equipo y no rasgarse las vestiduras por un 1-3 que más vale ahora que no más adelante. Los gitanos dicen que no quieren a sus hijos con buenos principios...